Actividad formativa sobre Valores y Motivación para Instituciones Públicas
Las administraciones públicas son en cierto modo el escaparate de nuestra sociedad. Representan el principal canal de conexión entre la ciudadanía y sus gobernantes, y es por ello que, a parte de las exigibles capacidades técnicas, los trabajadores de las instituciones deben tener también otras habilidades.
Para trabajar directamente con las personas, es decir, para ocupar puestos de responsabilidad sobre políticas, recursos, personas, etc. no basta con ser arquitecto, médico o abogado. Ni siquiera con ser buen arquitecto, buena médica o buen abogado. Hay una formación complementaria: 1) trabajar con los valores colectivos y actuar en consecuencia; 2) adaptar los conocimientos teóricos sobre valores en casos prácticos basados en situaciones reales, y 3) reflexionar sobre las implicaciones y las consecuencias de las decisiones que se adopten. En definitiva, generar sensibilidad sobre la dimensión ética de la tarea pública.
A tal efecto, la formación que proponemos incide de una manera muy especial sobre todas estas cuestiones porque, entre otras cosas, está protagonizada por personas con parálisis cerebral y otras discapacidades físicas severas, por un colectivo especialmente sensible a las implicaciones éticas de las relaciones humanas.
Aquí os dejamos un PDF con toda la información para descargar: